Es difícil para mí organizar mis sentimientos, por el momento todos quieren pasar al mismo tiempo. Tristeza, Ira, Angustia, Celos, Incertidumbre... posiblemente otros más pero éstos son los más fáciles de mencionar. ¿Cómo he vivido la semana? Es un tiempo corto el que estoy lejos de ti. Hemos mensajeado fluidamente los primeros días, todo bien. Unos ligeros tropiezos de comunicación. Esos tropiezos me hicieron darme cuenta que yo quería que hablaras conmigo como te he visto hablar con ella. Mensaje, mensaje, risa, mensaje. Me siento celosa de que te entusiasme tanto hablar con ella. Ayer al fin la verías. Antes de que llegara la hora acordada, me estuviste mensajeado constantemente... Me di cuenta cuando ella llegó. Desapareciste. Curioso, no está fácil redactar este texto porque siento como mi estómago se contrae de los nervios que le causa el que no te encuentres conectado y hayas respondido mis últimos mensajes. Ayer estaba viendo una serie con mi mamá y se iba a ver muy mal si cuan...
La niña que podía ver en la oscuridad. Tu eres un ser nocturno, tu hora favorita del día es el ocaso tardío ya casi casi, la noche. Y a diferencia o talves casualmente también la mía, la diferencia es que a ti te gusta la oscuridad que la noche extiende como una cobija de estrellas, fresca que aleja el calor del día y a mí me gusta el fuego de la tarde, el fuego de una fogata que está por apagarse cuando el carbón de un rojo encendido vibra y calienta el entorno, es esa calidez de un atardecer que poco a poco trae a la noche y eso significa: paz. Descanso eterno en una noche de infinitas posibilidades. Yo soy un ser de atardeceres, me gusta la luz, el último rayo de luz. Gracias por traerme la escritura de nuevo a mi mundo. ---atte. La chica de las montañas marinas ----